¿Cómo no poner en peligro con su pareja

¿Alguna vez no está de acuerdo con su cónyuge? O su novio o novia? Por supuesto que no - él / ella / derecha es perfecto,?

Se pueden imaginar mi sorpresa cuando mi amigo me confió que él y su esposa a menudo se peleaban por las cosas pequeñas.

"Estás bromeando".

"Sí, se pelean por los más pequeños, lo más importante", confirmó.

"Bueno, ¿por qué no te dejaba en su camino, entonces?"

"Debido a que también se pelean por las cosas grandes e importantes", admitió.

"¿Qué hay de compromiso?"

"Lo hacemos todo el tiempo", respondió.

"Entonces, ¿cuál es el problema?"

"El problema es que ella ha sufrido la mayor parte de los compromisos."

Compromisos nunca son fáciles. Un compromiso razonable es cuando ambas partes sienten que ganaron. Un compromiso verdaderamente grande es cuando ambas partes saben que perdieron.

El problema es que incluso el más modesto de nosotros, cuando de empuje en los peligros de compromiso, tienen egos inflable.

Por ejemplo, mi esposa y yo recientemente librando compromiso, y yo ni siquiera recordar lo que metedura de pata diplomática que había cometido. Pero ella estaba decidida a ponerme recta. "No seas tan prematura," mi esposa regañó.

"Prematuro?"

"Amateur, entonces," dijo.

"Amateur?

"No, la otra palabra. Deja de actuar como un niño como éste!" -gritó, en busca de un diccionario.

Dios nos dio diccionarios por lo que no tendría que escribir. Ellos son grandes libros con letra pequeña, y tratando de encontrar algo en ellos se acorta fusibles y, en el calor de compromiso, sólo puede conducir a lesiones de proyectil diccionario. Afortunadamente, nuestra casa está desordenada suficiente para ocultar incluso el diccionario más grande.

Es por eso que, cuando el compromiso es inminente, de vez en cuando me encuentro muy mojadas.

El agua nunca daño a nadie, me digo. Luego recuerdo de Noé. Y Jack. Y Jill. Pero hasta ahora, he evitado ahogando en mi propio dolor, lo que probablemente significa que estoy perdiendo menos concesiones que mi hermano.

Nuestra casa vive en una época de una frágil tregua. Afortunadamente, nadie está empeñado en la dominación del mundo.

Si acaba de aprender a poner el asiento del inodoro o limpiar el mostrador de mí mismo, podría lograr un golpe diplomático. Sin embargo, si lo hiciera, tendría que tenedor a cabo una recepción de la embajada, y mi esposa es la única empresa de catering en la casa. Además de que sería su fuerza en un rincón más incómoda de tener que poner el asiento del inodoro otros hacia abajo y cierre de las luces cuando se sale de la habitación para evitar una metedura de pata diplomática.

Siendo un amante esposo, estoy decidido a proteger a mi esposa de alguna molestia en su propia casa (o tener que atender a una recepción diplomática), por lo que me resisto a la tentación de anotar un golpe de Estado y diplomáticos que siguen dejando los mostradores mojado.

Me acuerdo de Noé. Y Jack. Y Jill. Pero hasta ahora, he evitado ahogando en mi propio dolor, lo que probablemente significa que estoy perdiendo menos concesiones que mi hermano.

Nuestra casa vive en una época de una frágil tregua. Afortunadamente, nadie está empeñado en la dominación del mundo.

Si acaba de aprender a poner el asiento del inodoro o limpiar el mostrador de mí mismo, podría lograr un golpe diplomático. Sin embargo, si lo hiciera, tendría que tenedor a cabo una recepción de la embajada, y mi esposa es la única empresa de catering en la casa. Además de que sería su fuerza en un rincón más incómoda de tener que poner el asiento del inodoro otros hacia abajo y cierre de las luces cuando se sale de la habitación para evitar una metedura de pata diplomática.

Siendo un amante esposo, estoy decidido a proteger a mi esposa de alguna molestia en su propia casa (o tener que atender a una recepción diplomática), por lo que me resisto a la tentación de anotar un golpe de Estado y diplomáticos que siguen dejando los mostradores mojado.

A veces es por el bien mayor para permitir un intercambio amistoso de fuego de francotiradores, a cubierto si parece que podría irse de las manos. El mundo es un lugar mucho más tranquilo cuando acabamos de aceptar que todos podemos felizmente se llevan bien, y que no estamos en peligro real que viven perpetuamente al borde de la transacción.